LA ENSOÑACIÓN COMO VIA PARA LA SANACIÓN
Esto cobra mas importancia cuando la persona enferma no se puede comunicar, como puede ser el caso del autismo, o su manera de expresarse es poco clara en general, como es el caso de los niños, al no tener muy identificadas sus emociones o con aquellas personas que tienen alteradas sus capacidades mentales.
En general, la visión que se tiene de la enfermedad en el ensueño, puede ayudar a identificar las emociones inconscientes que originan el problema, así como o donde se localiza el dolor.
También es fácilmente reconocible como afectan las situaciones externas a la persona, y que vinculo tienen estas con la enfermedad.
La enfermedad que tiene su origen en causas emocionales, en el ensueño es fácilmente reconocible, ya que al conectar con la energía de la persona enferma, se visualiza, viendo su mal, como si de una película se tratara, a veces película de terror, pudiendo interactuar, con los distintos personajes de esta, que representan distintas partes de la persona enferma como si se hiciera desde el plano físico, y teniendo a la persona delante.
En el ensueño, la persona afectada se comunica, diciéndonos como se siente, y nosotros podemos también comunicarnos con ella, enseñándole técnicas, enviándole energía, o abriéndole las puertas para que puedan empezar a percibir su problema desde otro ángulo.
La gran ventaja que tiene, es que se puede hacer en la distancia, aunque la respuesta del paciente es importante.
En el caso de los niños, es importante también trabajar con los padre, ya que dependen de ellos, incluso emocionalmente. Con los adultos es importante la respuesta que estos dan.
En cualquier caso, es crucial que se quiera sanar, ya que en muchas ocasiones, la enfermedad refuerza posicionamientos de vida tan fuertes, que la persona no quiere o no está preparada para hacer los cambios necesarios.
La comunicación con la persona se realiza a través del cuerpo de ensueño. Se entra en trance o en ondas thetha, y se llama a la persona por su nombre, a veces también es necesario el lugar donde vive. La primera vez que se conecta, el ensoñador se presenta y le dice porqué está allí, se pide permiso y se le pide que nos muestre su problema.
Al comunicarse a través de un vehículo energético, se conecta con el vehículo energético de la persona, donde esta crea su mundo, a manera de imágenes. Hay que decir, que las emociones se sienten fuertemente. Y ahí es donde empieza el juego.
Se pregunta, se interactúa…En muchas ocasiones, y sobre todo cuando se ha iniciado e l trabajo, se lleva a la persona a un lugar propio, el templo de sanación ,que previamente se ha creado por el ensoñador con este objetivo, y por lo tanto, es mas seguro y se puede disponer de las herramientas que este considere.
Llegados a este punto, conviene decir, que al entrar en el mundo emocional de otra persona, sus propios miedos, o cualquier otra emoción, puede encontrar un reflejo en nosotros, si tenemos algún asunto pendiente. Así que primero tendremos que resolver lo nuestro, para después ayudar a sanar a la persona.
La protección del ensoñador, cuerpo luminoso…, es importante a la hora de trabajar con otras personas, ya que en algunos, sobre todo en aquellos que tiene alteradas sus capacidades mentales, en un primer contacto ya se pude ver claramente, que tiene energías adheridas, que les drenan, y corremos el riego de no poder limpiarlas, o que el propio paciente se enganche a nuestra energía, como si de manera inconsciente nos lanzara los tentáculos.
El trabajar de esta manera conlleva una gran responsabilidad, ya que los contactos que se realizan son reales, y los cambios que se puedan hacer, también. Teniendo, el ensoñador, que mantenerse imparcial e impecable durante todo el proceso.
EMILIO FIEL
